Durante sus primeras intervenciones, Morales evitó referirse directamente a los procesos judiciales en su contra y se enfocó en destacar la necesidad de unidad dentro de su movimiento político. “Nuestra preocupación es cómo unirnos y fortalecernos como frente político”, señaló Morales, al tiempo que ratificó su intención de ser candidato presidencial en 2025.
“Nos quieren robar la sigla, pero no nos roban los principios. Algunos compañeros dicen ‘que nos robarán las siglas, pero no nos robarán a Evo’”, manifestó Morales, recordando que en el pasado también hubo intentos por dividir a figuras clave como Andrónico Rodríguez.
A pesar de la sentencia del Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP), Morales insistió en que sigue siendo el presidente del MAS-IPSP. No obstante, adelantó que participará en las elecciones generales de 2025 incluso si debe recurrir a una “sigla prestada”. “Nos vaya bien o no con el MAS-IPSP, vamos a participar en las elecciones nacionales”, afirmó.
Morales reveló que ya ha sostenido reuniones con representantes de al menos tres partidos políticos y no descartó la posibilidad de utilizar otra sigla para su candidatura. “Quizá nos regalen o nos presten sigla política, ese es el debate y las negociaciones”, comentó.
Finalmente, Morales cuestionó el liderazgo del presidente Luis Arce y la utilidad de la sigla del MAS sin él y otras figuras de su entorno. “Sin Evo, sin Andrónico, ¿para qué le sirve la sigla a Lucho? No le sirve para nada, y su candidato, su preferido, se está hundiendo: Manfred Reyes Villa”, concluyó.
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