(03/11/24 - Lesa Humanidad)-.El denominado juicio “Subzona III” aborda 123 casos de víctimas privadas ilegítimamente de su libertad y torturadas, y algunas de ellas abusadas sexualmente: 44 permanecen desaparecidas y 88 son casos que se tratan por primera vez en un juicio. Todos los acusados fueron condenados anteriormente en otros procesos. Se espera que declaren casi 230 testigos.
El Tribunal Oral Federal de Mar del Plata inició este viernes el juicio denominado “Subzona III”, donde juzgará la responsabilidad de veinte imputados que se desempeñaron en el Ejército, la Armada y la Prefectura Naval Argentina en un tercer tramo de la causa que aborda los crímenes contra la humanidad cometidos durante la época del terrorismo de Estado en el ámbito de la Subzona Militar 15.
Los jueces Nicolás Toselli, Fernando Minguillón y Martín Poderti abrieron el debate ante una sala colmada por el público. En el recinto estuvieron las defensas técnicas, el fiscal federal Santiago Eyherabide y los auxiliares fiscales María Eugenia Montero y Julio Darmandrail, y las querellas, pertenecientes a la Secretarías de Derechos Humanos de la Nación y a la Subsecretaría de Derechos Humanos bonaerense. Los acusados presenciaron el acto de manera remota.
El inicio se dio con la lectura de una síntesis del requerimiento de elevación a juicio, a cargo del Ministerio Público Fiscal. En total, son 123 los casos de víctimas que se analizarán en el debate, de los cuales 88 no tuvieron sentencia previamente.
El fiscal federal Santiago Eyherabide (centro) y los auxiliares fiscales Julio Darmandrail y María Eugenia Montero. Foto: B. Cano
“Se encuentra suficientemente acreditado que los hechos materia de imputación que se relatarán a continuación están incluidos dentro de los crímenes cometidos por miembros del aparato estatal que actuaron durante el último gobierno de facto instaurado en nuestro país”, sostuvo la fiscalía en la acusación.
En este marco, reparó en que las sentencias dictadas previamente “constituyen una fuente especialmente valiosa al momento de describir la materialidad delictiva de cada caso y valorar la prueba reunida” sobre las circunstancias que rodearon cada uno de los sucesos que ya han sido juzgados.
En la lectura de la pieza acusatoria se describieron secuestros de madrugada protagonizados por grupos armados contra víctimas que descansaban en sus viviendas, robos, interceptaciones violentas en bares, la vía pública y el Palacio municipal, homicidios, desapariciones, aplicación de tormentos y delitos sexuales en centros clandestinos de detención, en el marco de la persecución por razones políticas.
Las víctimas, se indicó, fueron estudiantes universitarios, militantes políticos, trabajadores de diferentes ramas, profesionales de distintas disciplinas y un concejal.
La fiscalía ofreció 228 testigos para que declaren en el proceso y requirió la incorporación de los videos con las declaraciones prestadas en otros juicios por testigos que, por diversas razones, no pueden presentarse en este debate. Quince de esas declaraciones corresponden a víctimas directas de los casos que se comenzaron a juzgar.
Los imputados que llegan a esta etapa del juicio oral son veinte y cuentan con sentencias condenatorias dictadas en otros procesos por igual tipo de delitos: Vírtom Modesto Mendiaz, Alfredo Manuel Arrillaga, Eduardo Jorge Blanco, Jorge Luis Toccalino, Carlos Alberto Suarez, Rubén E. Miguel Fernandez, Carlos Víctor Milanese, Raúl Alberto Marino, Roberto Mario Blanco Azcarate, Raúl César Pagano, Alfredo Raúl Weinstabl, Luis Héctor Bonanni, Daniel Eduardo Robelo, Julio César Fulgencio Falcke, Carlos María Robbio, Héctor Raúl Azcurra, Ernesto Davis, Carlos Arturo Mansilla, Néstor Ramón Eduardo Vignolles y Osvaldo Gaspar Siepe.
El objeto procesal está conformado por los crímenes de lesa humanidad que se cometieron en:
El ámbito de la Subzona Militar 15, bajo el comando de la Agrupación de Artillería de Defensa Aérea 601, con intervención de las Jefaturas de las Áreas 15.1 y 15.2, a cargo de los Grupos de Artillería de Defensa Aérea 601 y 602.
Los centros clandestinos de detención que funcionaron en la Base Naval Mar del Plata -Edificio Agrupación Buzos Tácticos-, la Escuela de Suboficiales de Infantería de Marina (ESIM), que funcionó en las instalaciones del Faro, y la Prefectura Naval Argentina de esa ciudad. De acuerdo con la investigación, esos lugares estuvieron en la órbita de la Fuerza de Tareas N° 6 de la Armada Argentina y operaron con dependencia funcional de la Subzona Militar 15.
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