Mientras Milei se muestra feliz por las fotos logradas en el G7, desde el plano internacional no para de recibir fuertes críticas a sus políticas. En el contexto de una economía en recesión, con un aumento de la pobreza y la indigencia, ahora es ni más ni menos que el Consejo de Derechos Humanos de la ONU quienes, en su nuevo informe, cuestionaron duramente al gobierno.
El Alto Comisionado Volker Türk, afirmó en su presentación que “En Argentina, las recientes medidas propuestas y adoptadas corren el riesgo de socavar la protección de los derechos humanos”. También cuestionó el cierre de instituciones estatales dedicadas al seguimiento y protección de los derechos de las mujeres. De manera contundente, afirmo “Insto a las autoridades a que sitúen los derechos humanos en el centro de su formulación de políticas, para construir una sociedad más cohesionada e inclusiva”, y remarcó “Esto implica también el pleno respeto del derecho de reunión pacífica y la libertad de expresión”.
Este informe es contundente, y se da a conocer cuando todavía quedan 16 presos políticos, luego de la brutal represión del Estado a los manifestantes de la marcha en oposición a la Ley Bases, el miércoles último pasado. Todo, mientras que los individuos que incendiaron el auto de Cadena 3, y se fueron en un auto con la patente dada vuelta filmados por las cámaras de televisión, permanecen prófugos. Se destaca este hecho ya que son varias organizaciones las que apuntan a una serie de grupos infiltrados, como responsables de los desmanes en la Plaza de los Dos Congresos e inmediaciones.
Así, el marco internacional con el que Milei se sentiría muy seguro y admirado, le demuestra que sigue atentamente y observa el deterioro democrático que vive Argentina, desde que el libertario está en el poder. Un gobierno, que sin lugar a dudas, con sus formas de represión y persecución, busca acallar las voces de protesta, en un émulo de los métodos usados por la dictadura.
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