El miércoles (26 de junio), un grupo de militares liderados por destituido general Juan José Zúñiga se posicionaron armados en la céntrica Plaza Murillo de La Paz y avanzaron con una tanqueta sobre el Palacio Quemado (Palacio de Gobierno), con el presunto objetivo de “restituir la democracia” y liberar a “presos políticos”. Tras una intervención directa de Arce, quien enfrentó cara a cara a Zúñiga en la puerta de la sede presidencial, los militares insurrectos depusieron las armas.
Zúñiga y otros altos mandos militares involucrados fueron detenidos, mientras que Arce designó como nuevo comandante en jefe del Ejército a José Wilson Sánchez, quien llamó a todos los militares movilizados a que regresaran a los cuarteles y prometió defender al “Gobierno legalmente constituido”.
Son 17 los aprehendidos por “golpe de Estado fallido”
El Ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, informó la tarde de este jueves que la cifra de aprehendidos por el “golpe de Estado fallido” en Bolivia ascendió a 17, la mayoría de ellos militares.
Las investigaciones preliminares revelan la existencia de un “ideólogo” detrás del plan, que se habría gestado desde mayo del presente año.
En una conferencia de prensa, Del Castillo presentó a los últimos aprehendidos y un organigrama que muestra la presunta estructura de los implicados, aunque aclaró que no incluye a todos los participantes del hecho que dejó un saldo de 12 personas heridas. Se trata de: Juan José Zúñiga, Juan Arnez, Juan Mario B.S., Román W. C., Julio O., Leonel T. S., Roberto O., Raúl B., Marcelo F. G., Franz L. O., Aníbal Abel A. G. (ciudadano civil), entre otros.
El organigrama detalla diferentes grupos, entre los que destaca el de “preparación y planificación”, liderado por el ex comandante del Ejército, Juan José Zúñiga, y el ex comandante de la Armada, Juan Arnez Salvador.
Las autoridades buscan a tres militares en retiro, incluyendo al principal sospechoso, el general Tomás Peña y Lillo. La esposa de Peña y Lillo denunció esta madrugada acoso policial y desconocimiento del paradero de su esposo.
Según el Ministro, familiares del militar prófugo habrían arrojado una bolsa de yute con municiones y estopies en la parte trasera de su domicilio.
Finalmente, Del Castillo solicitó la colaboración de la ciudadanía para capturar al mayor Miguel Ángel Burgos, quien según la inteligencia policial, fue quien dio instrucciones directas a los militares en la Plaza Murillo.
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