Ambos mandatarios discutirán la tarifa de la energía que genera la represa, que es la mayor del mundo y las obras de infraestructura en común y la marcha del Mercosur.
Peña llegará a Brasilia directo de Guatemala, donde asistió a los actos de asunción del nuevo presidente de ese país centroamericano, Bernardo Arévalo.
La Presidencia paraguaya anunció el encuentro con Lula, aunque con escasos detalles de lo que será analizado.
Se sabe, sí, que junto a Peña estarán el canciller Rubén Ramírez; la jefa de Gabinete, Lea Giménez; los ministros de Economía, Carlos Fernández Valdovinos, y de Industria y Comercio, Javier Giménez; y el director general paraguayo de la Itaipú, Justo Zacarías.
Del lado brasileño estarán junto a Lula el ministro de Relaciones Exteriores, Mauro Vieira; el embajador de Brasil en Paraguay, José A. Marcondes; el secretario de América Latina y el Caribe, Ricardo Monteiro; el embajador Audo Faleiro; y el director general brasileño de Itaipú, Enio Verri.
Las tarifas eléctricas
Los dos mandatarios iban a reunirse en octubre para abrir la negociación sobre la revisión tarifaria del llamado Anexo C de la represa hidroeléctrica Itaipú Binacional, pero ese encuentro se postergó.
Esta revisión de la parte tarifaria debe darse 50 años después de la firma del tratado que detalla la forma en que se gestiona la represa que comparten en la frontera.
El Anexo C del Tratado de Itapú, en vigor desde el 13 de agosto de 1973, contiene, entre otros puntos, las condiciones de abastecimiento y el costo del servicio de electricidad o tarifa, consigna la web de la represa.
El acuerdo establece que Paraguay y Brasil tienen derecho al 50 % de la energía generada por la represa, pero obliga a una parte a venderle a la otra el excedente que no utilice, y a un precio preferencial.
Como Paraguay le alcanza con una pequeña parte de lo que Itaipú genera, se siente perjudicado por tener que cederle el resto a Brasil a un precio muy por debajo al del mercado.
Otros temas en agenda
En la charla estará también la colaboración bilateral en materia de seguridad y, especialmente, las acciones en la extensa frontera común.
A fines de octubre, Brasilia y Asunción firmaron el llamado Compromiso de Asunción contra la corrupción, el crimen organizado y el lavado de activos, en busca de combatir a las bandas que actúan de los dos lados de la frontera.
Las autoridades hablaron de combatir a las organizaciones brasileñas del crimen organizado Primeiro Comando da Capital (PCC) y Comando Vermelho, nacidas en las cárceles de Brasil y que tienen fuerte presencia en Paraguay.
Un último tema será la marcha del Mercosur y las discusiones por un acuerdo con la Unión Europea, un punto que Peña -que ejerce la presidencia pro-tempore del bloque sureño desde diciembre- no tiene entre sus prioridades, según explicó.
Lula y Peña se vieron dos veces, ambas en Brasilia, en mayo y julio del año pasado, antes de que el paraguayo asumiera al frente del Palacio de López, y en diciembre compartieron la cumbre del Mercosur que se hizo en Rio de Janeiro.
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