Según el exmandatario, el "afán electoralista" de Arce lo empujó a impulsar una estructura paralela e ilegal, en el marco de un "congreso antirreglamentario" que vulnera los estatutos partidarios.
"En su afán electoralista, algunos en el Gobierno están dispuestos a crear un MAS-IPSP paralelo e ilegal, promoviendo un congreso antirreglamentario vulnerando nuestros estatutos”, denunció Morales en sus redes sociales.
Fue en respuesta a un reclamo que el martes hicieron Arce, el vice David Choquehuanca, las cinco organizaciones que integran el llamado Pacto de Unidad y la Central Obrera Boliviana (COB) para que se llame a un nuevo congreso nacional del MAS, que elija una nueva conducción y al candidato presidencial para 2025.
La directiva del MAS, controlada por Morales, hizo un Congreso en Lauca Ñ, Cochabamba, a comienzos de octubre, pero el Tribunal Supremo Electoral (TSE) lo declaró nulo semanas después, dejó sin efecto sus decisiones y ordenó un nuevo encuentro.
“Ya dividieron a las organizaciones sociales; ahora quieren destruir al 'Instrumento Político'", advirtió Morales en su mensaje.
Y siguió: “Si tan preocupados están por obedecer el mandato del `cabildo` que se organizaron, ¿por qué no cumplen con reformar la justicia, luchar contra la corrupción, la burocracia, narcotráfico, contrabando, además del pedido de cambio de ministros?".
El quiebre del MAS
El enfrentamiento entre los dos sectores, “evistas” y “arcistas”, amenaza con hacer que el MAS llegue dividido a los comicios de 2025 y se manifiesta también en la Asamblea legislativa, donde funcionan dos sub-bloques.
De uno y otro lado se acusan de estar aliados a las fuerzas de centroderecha, como Creemos y Comunidad Ciudadana (CC).
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