El incidente tuvo lugar el 4 de julio después de que los agentes participaron en una larga persecución de un semirremolque por falta de un guardabarros conducido por el afroamericano en una autopista cerca de la ciudad de Columbus, según un informe de la Patrulla Estatal de Carreteras de Ohio.
Vídeos publicados muestran cómo el perro policial K9 ataca a Rose y le muerde en el brazo, quien, en rodillas, gritando de dolor, suplica “por favor, quítalo”.
La brutalidad de la Policía de EE.UU., que es la sexta causa de muerte entre los jóvenes afrodescendientes, ha suscitado críticas de diversas organizaciones de derechos civiles. Los críticos señalan que los cimientos del racismo son inherentes al sistema política estadounidense por ser parte de las instituciones públicas del país norteamericano.
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