Estos lineamientos serán el ejercicio de una diplomacia “nacional, autónoma, democrática, social y descentralizada”, explicó a los ex cancilleres y ex viceministros presentes en la ceremonia, resaltando que su gestión se inspirará “en la historia y realidad nacional, la pluralidad cultural y étnica del Perú”, y que se orientará en función de los intereses nacionales.
Asimismo, indicó que la principal prioridad de su mandato ministerial será la lucha “sostenida y coherente” contra la pandemia del Covid-19, así como la inmunización de la población, la reactivación económica y la regresión en la lucha contra la pobreza y la pobreza extrema. Adicionalmente, aseguró que gestionará acuerdos con Covax Facility a fin de las vacunas que obtendrá nuestro país a través de este mecanismo internacional, lleguen con celeridad.
Por otro lado, sostuvo que la cancillería fortalecerá la integración latinoamericana “sin distinciones ideológicas”, y se revalorará la Comunidad Andina en sus dimensiones espaciales, económicas, comerciales, sociales, culturales y de integración física. La solicitud para que el Perú renuncie al tratado de Unasur, será retirado del Congreso, según adelantó, agregando que nuestro país se reinsertará en la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (CELAC) e impulsará el acuerdo de Escazú.
El canciller recordó al poeta y guerrillero Javier Heraud, señalando que “su poderoso e inmortal espíritu ingresó oficialmente a la historia de la patria”.
Finalmente, el canciller condenó los “bloqueos y embargos” unilaterales, respaldando el derecho de cada país de mantener intercambios según su voluntad.
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