El reporte también critica el manejo, por parte de las Fuerzas Armadas, de las denuncias de acoso y agresión sexual. En este sentido, declara que las mujeres soldado tienen una plena falta de fe en el sistema de quejas del Ministerio de Defensa y 6 de cada 10 eligen no hablar sobre el abuso que sufren. De acuerdo con el documento, un tercio de las que se quejaron tildó la experiencia de “extremadamente mala”.
Asimismo, es “extraordinario” que el Ministerio de Defensa del Reino Unido no esté haciendo bien las cuestiones básicas, como el trabajo en equipo, critica el informe, instando a tal Cartera a ser más consciente de los problemas de salud de las mujeres.
Nuevas estadísticas indican que 60 presuntas violaciones y 180 reclamaciones de asalto sexual entre miembros del Ejército británico han sido investigadas por la policía militar en los últimos cinco años.
De igual modo, exige al Ministerio de Defensa que elimine los casos de violación y agresión sexual de los tribunales militares y del Sistema de Justicia del Servicio y, en su lugar, los haga llegar al sistema de tribunales civiles. La cadena de mando también debe eliminarse por completo de las denuncias de naturaleza sexual.
Al respecto, el presidente del Comité de Defensa, Tobias Ellwood, indicó que se debe hacer más para proteger y brindar servicios a las mujeres militares del país, que, con demasiada frecuencia, han sido defraudadas por el Ministerio de Defensa. “El tema de la agresión sexual y la violación en el Ejército es urgente”, alertó.
En esta línea, la veterana del Ejército británico y presidenta del mencionado Subcomité de la Mujer, Sarah Atherton, remarcó que “la agresión sexual y la violación forman parte de los delitos más graves cometidos contra el personal del servicio femenino [...]. Es difícil no conmoverse por las traumáticas historias, tanto emocionales como físicas, que sufren las mujeres a manos de sus colegas”.
Es más, Atherton señaló que “no puede ser correcto que las tasas de condenas en los tribunales militares sean de cuatro a seis veces más bajas que en los civiles. A las mujeres militares se les niega que se haga justicia”.
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