La cadena argelina Al Waqie ha informado, mediante una nota publicada este sábado, que Argelia ha tomado los primeros pasos para establecer un grupo en rechazo a la participación de Israel en la UA como miembro observador, en un intento por salvaguardar los principios del bloque y en el marco del respaldo a Palestina.
Entre los países que han acordado unirse a la iniciativa de Argelia, figuran Sudáfrica, Túnez, Eritrea, Senegal, Tanzania, Níger, el archipiélago de Qamar, Gabón, Nigeria, Zimbabwe, Liberia y Seychelles, precisa el informe.
Esto después de que Israel se reintegrara el 22 de julio como miembro observador en la Unión Africana, la mayor organización del continente compuesta por 54 países, después de que el ministerio de exteriores del régimen de Israel anunciara que su embajador en Adís Abeba, capital etíope, presentó las credenciales de la entidad como miembro observador de la UA. Israel ya había perdido ese lugar tras el paso de la Organización de la Unidad Africana (OUA) a la Unión Africana en 2002.
Ya antes del nuevo consenso entre los 14 países del bloque africano para expulsar a Israel, Sudáfrica, Namibia y Argelia habían presentado protestas en rechazo a la medida israelí en cuestión.
De hecho, alertaron que la decisión de aceptar el régimen de Tel Aviv como miembro observador de la UA no coadyuvaría a legitimar sus acciones y comportamiento.
Durante su mandato, el ex primer ministro de Israel Benjamín Netanyahu impulsó una agenda, haciendo ambiciosos esfuerzos por retomar las relaciones con los países africanos.
A pesar del rechazo popular, Israel mantiene relaciones con 46 países africanos y en los últimos años ha renovado sus contactos diplomáticos con Chad y Guinea, además de Sudán, con el que ha normalizado relaciones.
Conforma denuncia la Resistencia palestina, la adhesión de Israel a la UA da legitimidad a la ocupación de los territorios ocupados y allana el camino para que el régimen sionista continúe cometiendo crímenes brutales contra el pueblo palestino.
En este sentido, el Movimiento de Resistencia Islámica de Palestina (HAMAS) ha pedido la expulsión inmediata de la entidad israelí de la UA y la imposición de sanciones disuasorias hasta el restablecimiento de la justicia y el cumplimiento de las aspiraciones de un pueblo bajo ocupación, es decir, la formación de un Estado palestino con Al-Quds (Jerusalén) como su capital, y el regreso de los que se encuentran desplazados por la fuerza a su hogar.
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