“Creo que este es el momento para que se produzcan cambios en el mundo hacia la paz. Es el momento de cambiar las armas atómicas por hospitales, por puestos de salud (…) El mundo ha quedado descarnado con esta pandemia y de qué sirven las bombas atómicas”, declaró el miércoles Daniel Ortega, desde la casa presidencial.
El jefe de Estado también aseguró que Nicaragua lucha “con paciencia” contra el COVID-19 y abogó por una consciencia de paz y de unidad entre los pueblos del mundo para poner fin a todo tipo de guerra y agresión.
Advirtió asimismo que, aunque no es la primera vez que existan pandemias, la provocada por el nuevo coronavirus está golpeando sin precedentes la economía mundial.
El mandatario nicaragüense, en referencia a la situación dramática que vive el pueblo de EE.UU. a raíz de la COVID-19, lamentó que la potencia militar y económica más grande del mundo no tenga la capacidad para dar respuesta a sus propios ciudadanos, que mueren por esta enfermedad letal y son enterrados en fosas comunes en parques.
A continuación, Ortega resaltó que Nicaragua está luchando con eficiencia contra la COVID-19 y ya cuenta con equipos, hospitales, puestos de salud y cuerpo médico especializado para atender a las familias de manera ordenada, siguiendo las recomendaciones de organismos internacionales pero apegados a nuestra realidad.
En Nicaragua, afirmó Ortega, hay reportado del 11 de marzo al 15 de abril, 1237 personas fallecidas, pero solo una por el nuevo coronavirus.
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