La primera muerte de un contagiado con coronavirus en Latinoamérica se dio a conocer este sábado en la Argentina, lo cual generó una psicosis colectiva importante.
Al respecto, el ministro de Salud de la Nación, Ginés González García, aseguró que no se piensa en modificar las recomendaciones de prevención por el COVID-19, como se bautizó al virus que promete con transformarse en pandemia en los próximos meses.
Dijo que el primer fallecido, Guillermo Abel Gómez –un hombre de 64 años de edad que había viajado a Francia, retornó al país el 25 de febrero pero recién acudió a un centro de salud el 5 de marzo– era “un paciente ya enfermo, con muchas patologías”, como diabetes, hipertensión, bronquitis crónica e insuficiencia renal, aunque destacó como “buena noticia” que en el país había otros 8 casos potenciales “que dieron negativo”.
Al ser internado en el Hospital Argerich, donde falleció, Gómez ya tenía somnolencia, falta de apetito, fiebre entre 39 y 40 grados, tos y dolor de garganta, y un cuadro de insuficiencia respiratoria que requirió asistencia mecánica inmediata.
Por lo expuesto es que, de acuerdo al funcionario, “las medidas cambiarían más cuando haya evidencia de diseminación, de circulación del virus”.
“Ahí es cuando empezarían las medidas con cierres de espectáculos, como por ejemplo en el norte de Italia, pero para eso tiene que haber virus circulando en la sociedad”, aclaró, y agregó que “hay más de 90 países que tienen algunos casos, pero solamente 6 están tomando este tipo de medidas de cierre de espectáculos”.
En declaraciones a Clarín, Ginés subrayó que no hay “ninguna posibilidad” de que los casos no sean importados y, si bien advirtió que “nadie puede decir que no vaya a haber más casos”, aseveró que “la Argentina está preparada y tomando todas las medidas necesarias para afrontar el coronavirus”.
Respecto del uso de alcohol en gel y barbijos, dijo que “salvo los vendedores de barbijos y alcohol en gel, no sé quién otro sale favorecido”, y subrayó que “los problemas que tenemos hoy son dengue, sarampión y posibilidades de coronavirus”.
Por último, destacó que se trabaja con la misma intensidad tanto con el sector público como con el privado, ya que “es más probable que un paciente (con síntomas de coronavirus) vaya primero al sector privado, porque son de un nivel medio para arriba los que viajan en avión”.
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