La concentración fue convocada para las 17:00 hora local por la Mesa de Unidad Social, plataforma de alrededor de un centenar de organizaciones de todo tipo que ha encabezado las grandes demostraciones populares que se desarrollan en el país desde el 18 de octubre.
el llamado a la plaza Baquedano formó parte del denominado Súper Lunes, con una serie de protestas en esta capital y otras ciudades durante todo el día.
A las 19:00 horas, justo cuando se sentía un fuerte sismo de más de seis grados que remeció a buena parte del país, las fuerzas policiales arremetieron contra los manifestantes, lanzando gran cantidad de gases que hicieron irrespirable el ambiente en la plaza, mientras corros lanza agua barrían a los participantes en la concentración.
La demostración popular se había realizado hasta ese momento en forma totalmente pacífica, con miles de personas enarbolando banderas de Chile y mapuches y pancartas con sus reclamos al gobierno de Sebastián Piñera.
Hasta ese momento solo se habían producido aislados choques entre grupos de encapuchados y carabineros en la avenida Vicuña Mackenna, cerca de la plaza, pero en cambio los carros policiales arremetieron contra los concentrados en la explanada, que se desplazaron hacia las calles adyacentes.
Como ha ocurrido en otras ocasiones, la plaza quedó prácticamente vacía solo por unos momentos, pues minutos después de la arremetida policial miles de personas retornaron al lugar, para de nuevo ser dispersadas por las fuerzas policiales, una y otra vez.
Igualmente se produjeron choques entre grupos de manifestantes y carabineros en varios puntos de la Alameda, la principal avenida de la ciudad, que había sido cerrado al tráfico de vehículos desde temprano.
La brutalidad con que las fuerzas militares y policiales han reprimido a los participantes en las manifestaciones en las últimas semanas ha sido denunciada nacional en internacionalmente.
Incluso, este lunes la Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú, de visita aquí, entregó en el palacio de La Moneda una carta dirigida al presidente Sebastián Piñera en la que condenó la flagrante y sistemática violación de los derechos humanos en Chile.
Grandes manifestaciones, también reprimidas por carabineros, se realizaron en las ciudades de Concepción, Valparaíso, Viña del Mar, Arica, Talca, Curicó, Talcahuano y otras ciudades de norte a sur del país.
En esta capital distintos reportes dieron cuenta de al menos un manifestante y dos carabineras heridos, así como un número indeterminado de detenidos en diferentes localidades del país.
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