En una reunión, celebrada este viernes en la sede de la organización indígena, conforme había convocado la víspera, el presidente de la Conaei, Jaime Vargas, ha destacado que la conformación del “Parlamento Popular de los Pueblos” tiene como objetivo debatir y construir “un modelo económico que construya, que nos permita construir, ese concepto tan importante del estado plurinacional”.
A la cita, han acudido, además representantes de los trabajadores, estudiantes, migrantes, comerciantes minoristas, Alberto Acosta, expresidente de la Asamblea Constituyente y Pablo Dávalos, asesor de la Conaie.
Vargas ha subrayado que buscan una propuesta integral desde los sectores sociales, que vaya más allá del tema del subsidio a los combustibles: “cómo salir de esta crisis económica”.
Esto, debido a que el ministro de Finanzas ecuatoriano, Richard Martínez, anunció que el nuevo decreto que reemplazase al 883 estaría listo antes de terminar octubre.
Un modelo económico que construya, que nos permita construir, ese concepto tan importante del estado plurinacional”, dice Jaime Vargas, presidente de la Confederación de Nacionalidades Indígenas del Ecuador (Conaie), al indicar el objetivo que busca la conformación de un “parlamento popular”.
Los indígenas no son terroristas
“No somos terroristas, no somos guerrilleros, no somos subversivos”, ha enfatizado Vargas, en alusión a una filtración en la que, supuestamente, llamaba a las bases indígenas a formar su propio ejército.
Sobre estas declaraciones, la Fiscalía General ecuatoriana anunció el inicio de una investigación contra Vargas por presunta promoción de grupos subversivos, delito que es castigado con pena privativa de la libertad de entre cinco y siete años.
Diálogo suspendido
Hace solo tres días, la organización indígena decidió suspender el diálogo que sostenían desde el 13 de octubre con el Gobierno de Lenín Moreno, y que había detenido las fuertes protestas en el país andino.
El presidente de la Conaie dijo el miércoles que el congelamiento de las conversaciones obedece a que “no ha habido ambiente de diálogo”, sino una “persecución a los dirigentes”; sin embargo, señaló que retomarán las conversaciones cuando haya las “garantías” o “condiciones” mínimas para este proceso.
Ecuador vivió más de una semana de protestas violentas, que terminaron el pasado día 13, tras un acuerdo entre movimientos sociales, fundamentalmente la Conaie, y el Gobierno, después de que Moreno derogó el decreto con el que eliminó los subsidios a los combustibles.
De acuerdo al último informe oficial de la Defensoría del Pueblo, entre el 3 y 13 de octubre, en el contexto de las protestas, murieron ocho personas y 1340 resultaron heridas.
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