(21/03/19 - Memoria Verdad y Justicia)-.El edificio en el que funcionó una Brigada de Inteligencia de la policía bonaerense y que durante la dictadura fue conocido como "Pozo de Banfield", agregándose al circuito de centros clandestinos de detención, tortura y exterminio que la Justicia denominó Circuito Camps, abrirá mañana sus puertas a la comunidad, en forma permanente, como sitio de la Memoria, en vísperas de la conmemoración del próximo domingo del Día de la Memoria, la Verdad y la Justicia, a 43 años del último golpe militar.
La actividad comenzará con una radio abierta, el viernes próximo, a 48 horas de la movilización prevista por organismos de derechos humanos hacia la Plaza de Mayo.
Guillermo Ayala, integrante de la mesa organizativa del Pozo de Banfield, explicó cómo el lugar funcionó no sólo como centro clandestino sino también como una maternidad clandestina en la que nacieron nueve bebés, de los cuales, se pudieron recuperar dos nietos, gracias al trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo.
"El pozo no dejó de ser pozo cuando cayó la dictadura, hubo un proceso para que ese espacio dejara de ser lo que era, las luchas de los organismos de derechos humanos permitió que todos fuéramos continuadores de esa pelea en los diferentes momentos históricos", contó Ayala en una entrevista realizada por Megasur, la emisora de la Universidad Nacional de Lanús.
En tanto, María Bertone, quien también participa de la mesa de organización, indicó que en ese espacio "trabajamos hace seis años en el sitio y hemos realizado algunas actividades primero cortando la calle y en forma esporádica pero por eso es tan importante mañana, porque se abren las puertas definitivamente".
"El pozo también se utilizó como destino final de muchos compañeros y formó parte del Circuito Camps -centros clandestinos que dependieron de la Jefatura de la Policía de la Provincia de Buenos Aires- por eso será significativo no sólo para Lomas sino también para la Provincia de Buenos Aires y la Nación".
Sobre el proceso de construcción de la memoria comunitaria, Bertone contó que "anterior a la dictadura, el Pozo era una brigada de Inteligencia, por lo cual los vecinos sabían que se trataba de un lugar complicado y los ruidos o las cosas que veían se fueron naturalizando. Hoy todo ese proceso se revirtió con la lucha de los organismos y por eso la resignificación es tan importante", manifestó.
Las actividades comenzarán mañana desde las 10 con la realización de una radio abierta e intervenciones artísticas, en las calles Siciliano y Vernet de Villa Centenario, partido de Lomas de Zamora.
La actividad comenzará con una radio abierta, el viernes próximo, a 48 horas de la movilización prevista por organismos de derechos humanos hacia la Plaza de Mayo.
Guillermo Ayala, integrante de la mesa organizativa del Pozo de Banfield, explicó cómo el lugar funcionó no sólo como centro clandestino sino también como una maternidad clandestina en la que nacieron nueve bebés, de los cuales, se pudieron recuperar dos nietos, gracias al trabajo de Abuelas de Plaza de Mayo.
"El pozo no dejó de ser pozo cuando cayó la dictadura, hubo un proceso para que ese espacio dejara de ser lo que era, las luchas de los organismos de derechos humanos permitió que todos fuéramos continuadores de esa pelea en los diferentes momentos históricos", contó Ayala en una entrevista realizada por Megasur, la emisora de la Universidad Nacional de Lanús.
En tanto, María Bertone, quien también participa de la mesa de organización, indicó que en ese espacio "trabajamos hace seis años en el sitio y hemos realizado algunas actividades primero cortando la calle y en forma esporádica pero por eso es tan importante mañana, porque se abren las puertas definitivamente".
"El pozo también se utilizó como destino final de muchos compañeros y formó parte del Circuito Camps -centros clandestinos que dependieron de la Jefatura de la Policía de la Provincia de Buenos Aires- por eso será significativo no sólo para Lomas sino también para la Provincia de Buenos Aires y la Nación".
Sobre el proceso de construcción de la memoria comunitaria, Bertone contó que "anterior a la dictadura, el Pozo era una brigada de Inteligencia, por lo cual los vecinos sabían que se trataba de un lugar complicado y los ruidos o las cosas que veían se fueron naturalizando. Hoy todo ese proceso se revirtió con la lucha de los organismos y por eso la resignificación es tan importante", manifestó.
Las actividades comenzarán mañana desde las 10 con la realización de una radio abierta e intervenciones artísticas, en las calles Siciliano y Vernet de Villa Centenario, partido de Lomas de Zamora.
Publicar un comentario